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domingo, 9 de marzo de 2014

La institución y su contexto




Nuestro país cuenta con aproximadamente 3.400.000 habitantes que se concentran especialmente en la capital y zona metropolitana y otros centros urbanos. Cuenta con una división administrativa y política en 19 departamentos entre los que se encuentra Rocha, ubicado hacia el sureste del país con costa sobre el Océano Atlántico y frontera con Brasil, con alrededor de 68.000 habitantes. La institución en la que trabajo y que elegiré como objeto de mi tarea en este curso es el único de los liceos de la ciudad fronteriza de Chuy (9.675 habitantes) que cuenta con Bachillerato.
Posiblemente sea, debido a su ubicación, el liceo más heterogéneo de todo el departamento ya que a él asisten tanto alumnos de la propia ciudad (que ya es en sí muy heterogénea en su composición) como otros estudiantes provenientes de balnearios y pueblos cercanos. Chuy es una ciudad principalmente comercial atravesada por una calle que limita con la ciudad gemela de Chuì del lado brasileño. Gran cantidad de pobladores son bilingües -particularidad de esta zona de la frontera es que no mezclan los idiomas sino que manejan ambos- y se dedican a diversas ramas del comercio con énfasis en los free-shop establecidos del lado uruguayo. En verano se intensifica la actividad por la gran afluencia de turistas a los balnearios de la costa del departamento mientras en invierno en la zona costera se desarrolla la construcción y en el interior los cultivos de arroz, soja y la ganadería.
El departamento tiene mayor facilidad para absorber laboralmente a egresados de estudios técnicos y de enseñanza media en general que a profesionales, hecho que, junto a la escasa diversidad de oferta laboral, podría explicar la emigración de 12 por mil habitantes al año, cifra que se ve compensada por una inmigración del 8 por mil. Sin embargo, si bien la zona cuenta con instituciones de enseñanza media pública con egreso hacia la formación terciaria, no cuenta con una fuerte oferta de formación técnica, situación que recién se comienza a intentar revertir concretamente en Chuy con la instalación hace un par de años de un instituto secundario de enseñanza técnica que aún no cuenta con una oferta muy diversa de cursos.
Los profesores que integran esta comunidad educativa tienen variados tipos de formación con un alto índice de titulados en formación docente y, en general, con fuerte compromiso  con su tarea, sin embargo frente al uso de las TIC hay un amplio abanico de actitudes que abarcan desde el entusiasmo hasta la renuencia, desde la total competencia al analfabetismo digital. En este sentido los cursos en línea que ofrece el Plan Ceibal no vienen siendo apropiados para llegar precisamente a aquellos que se sienten más distantes de las nuevas tecnologías. He aquí un aspecto a trabajar ante los desafíos que se avecinan.
En este marco el bachillerato del liceo público de Chuy es vital para los estudiantes que tienen un proyecto de formación universitaria pero presenta dificultades para retener a aquellos que, debido a su procedencia de un contexto socioeconómico desfavorable, no elaboran un proyecto que los motive a continuar estudiando ya que, si continúan viviendo en la zona, podrían insertarse laboralmente sin que se les requiriera un alto nivel de estudios.

Los que se quedan y los que se van
Aun para volver luego con su título universitario, los egresados del bachillerato, deberán emigrar a realizar sus estudios a otro departamento o a la capital. La Universidad de la República apenas comienza sus esfuerzos de descentralización e instalación en la capital departamental pero esto aún no tiene un impacto relevante. Por lo tanto estamos formando alumnos que necesitarán manejarse con autonomía y dominar las TIC;  de hecho actualmente el panorama de conectividad de nuestros estudiantes es total. Todos frecuentan las redes sociales, todos pueden buscar información, el liceo cuenta con una sala de informática que es también utilizada por el Ministerio de Desarrollo Social ampliando así la alfabetización digital a sectores de adultos más carenciados incluidos en programas de capacitación.
Todavía no han llegado al nivel de bachillerato los alumnos que participan desde educación primaria del Plan Ceibal pero tenemos que prepararnos porque en breve llegarán. El liceo incorporó hace solamente un año el bachillerato Artístico y en este curso que recién comienza contarán con equipo de filmación.
Existe  una sala dedicada exclusivamente al visionado de audiovisuales que debe ser reservada con antelación para su uso. 
Los egresados cuentan en general con una buena formación académica para llevar adelante su formación terciaria –quizás en ingeniería haya más dificultades- pero el verdadero reto al que se enfrentan es sobrellevar el desarraigo y el cambio de hábitos cotidianos que implica la adaptación a la vida urbana de Montevideo.

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